Los desahucios

En España la crisis económica de 2008, derivada de la burbuja inmobiliaria, ha acentuado el número de ejecuciones hipotecarias y de desahucios por falta de pagos de alquiler de la vivienda.

La palabra desahucio se oye todos los días en los telediarios. Podemos decir que en España los desahucios constituyen una tragedia social. Es muy duro ver imágenes de como personas de todas las edades son arrojadas a la calle y despojadas de su casa.





¿Pero cómo se ha llegado hasta este punto?
Tendríamos que remontarnos al año 2000, donde España tenía una economía floreciente:
  • La locomotora española era ladrillo
  • Tipos de intereses muy bajos
  • La liberalización del suelo
  • La implantación del euro
  • Deducciones por compra de vivienda
  • Una buena tasa de empleo
Todo ello hizo que los españoles aplicaran aquel dicho de "alquilar es tirar el dinero. ¿Para qué vas a pagar el alquiler, si por el mismo precio pagas una hipoteca?". Y así es como muchas personas se lanzaron a comprar una vivienda.
Los bancos concedieron créditos de forma indiscriminada y las familias acudían a firmar hipotecas y endeudarse hasta 30 años o más, junto a sus padres y familiares que les avalaban la compra.


Cada año se iniciaban una media de unas 600.000 casas, llegando al récord de 762.540 en 2006, más que las iniciadas en Italia, Francia y Alemania juntas, según informó el ministerio de fomento.

Así es como el mercado inmobiliario creció y creció hasta que explotó como un globo porque la oferta de viviendas era mayor que la demanda. Los precios se dispararon por encima de su valor real, los bancos dejaron de prestar dinero, el consumo se desplomó, se contrajo la economía, las empresas empezaron a despedir a millones de trabajadores y las familias sin trabajo se vieron incapaces de pagar su hipoteca, quedando endeudados de por vida.

En esta gráfica podemos ver la evolución del precio de la vivienda desde 2005 hasta el 2018. En la parte donde se eleva, corresponde al momento donde los precios de estas viviendas aumentaron en gran medida, y cómo a partir de 2008 comienza a haber una disminución considerable de los precios. Estamos entrando ya en el momento de recesión.

Desde que comenzó la crisis se han producido más de 400.000 ejecuciones hipotecarias.


Aquí se ve bien la evolución de los desahucios. Podemos observar cómo los desahucios por ejecuciones hipotecarias han disminuido un 16% en los últimos años (debido a la moratoria establecida recientemente, porque se encuentran paralizados en espera de la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la UE y por la renegociación de bancos con deudores) y están aumentando los desahucios por impago de alquiler (debido al alto precio de los alquileres). Estos últimos representan un 62,5% del total.


Y, ¿cuál es el procedimiento de un desahucio por impago de alquiler?
Se inicia cuando el inquilino no paga una o varias rentas al propietario de la vivienda. Tiene varias fases:
  1. El propietario intentará conocer las causas del impago y alcanzar un acuerdo para un pago aplazado o la finalización del contrato de alquiler.
  2. Si esto no es posible, se le mandará un burofax para reclamar el pago de la renta donde se especifica: el importe adeudado, la reclamación del pago, el plazo para pagar, la forma de pago y un aviso de iniciar acciones judiciales.
  3. Una vez transcurrido el plazo, si no se ha pagado, se puede iniciar el procedimiento de desahucio.
El procedimiento de desahucio por lo tanto es:
  1. La demanda: la cual se presenta en el tribunal que corresponda según el lugar de la vivienda.
  2. Vista del juicio: si el inquilino se opone a la demanda, se celebrará el juicio en un plazo entre 1-3 meses.
  3. Sentencia: el juez una vez probado el impago, condenará a pagar lo debido y a desalojar el inmueble (y además, a pagar las costas del juicio).
  4. Lanzamiento: momento en el que se ejecuta la sentencia (es el momento del desahucio).

En el caso de un desahucio por impago de hipoteca, es el banco quien inicia la ejecución hipotecaria.
El 18 de febrero de este mismo año, el congreso aprobaba la nueva ley hipotecaria que obliga a los bancos a asumir parte de los costes de una hipoteca como es el impuesto de Actos jurídicos documentados, prohíbe las cláusulas suelo, flexibiliza la negociación de los impagos y facilita la dación en pago siempre que ambas partes estén de acuerdo.


Cómo afecta
Es un drama social.
La Escuela de Negocios ESADE ha realizado un estudio con el objetivo de conocer en profundidad la vivencia de los afectados en todo el proceso de desahucio, con el fin de promover herramientas que ayuden a prevenir y gestionar mejor este proceso.
Según resultados, podemos comparar las consecuencias psicológicas de los afectados con un trastorno de estrés postraumático que suele producirse tras haber sufrido un acontecimiento altamente traumático como es la pérdida de un ser querido. Produce ansiedad, desánimo, abatimiento, culpabilidad, tristeza...). Esta reacción emocional puede provocar problemas de salud, cambio de objetivos en la vida, falta de autoestima...


Pero una de las consecuencias más dramáticas de los desahucios es el suicidio de personas afectadas. Muchas se quitaron la vida arrojándose desde su propia vivienda.
Después de los suicidios, las manifestaciones llevadas a cabo y las fuertes quejas de muchos sectores, han llevado a que algunas entidades bancarias como Caja Laboral y Kutxabank decidieran parar los desahucios en las familias en situaciones extremas.



Organizaciones contra los desahucios
Plataforma para una vivienda digna
Dentro de los movimientos de lucha ciudadana por una defensa efectiva del derecho a la vivienda, hay que señalar a la Plataforma por una vivienda, una asociación de ámbito nacional que inició su andadura en 2003 (antes de que estallara la burbuja inmobiliaria), esto significa que el problema de la vivienda no es nuevo. 
Esta plataforma pretende ni más ni menos que se cumpla el artículo 47 de la constitución: asegurar que todos tengan una vivienda digna y adecuada y que se impida la especulación.




Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH)
Hay otra plataforma, que es la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, un movimiento social surgido en Barcelona en el año 2009 (donde se hizo conocida Ada Colau, actual alcaldesa de Barcelona), y se ha extendido por todo el estado español.
La PAH está formada por personas con dificultades para pagar la hipoteca o que se encuentran en proceso de ejecución hipotecaria. La PAH, junto con otros movimientos de la ciudadanía en contra de los desahucios, representan la justa movilización por el desamparo de millones de personas ante los ataques de poderosas entidades financieras empresariales con el apoyo de unos gobiernos que han hecho al Estado cómplices de sus injusticias.


Medidas para acabar con los desahucios
  1. Eliminación de las cláusulas abusivas
  2. Oficinas de asesoramiento en todas las comunidades
  3. Fondo de garantía hipotecaria: es el derecho que se concede sobre un inmueble una persona o entidad con la que se contrae una deuda o compromiso, para que en caso de que dicha deuda no sea satisfecha, tenga la posibilidad de convertirse en propietario y vender dicho inmueble para recuperar dinero.
  4. Legimitar la ocupación de viviendas vacías
  5. Dación en pago: entregar el inmueble a cambio de la deuda.
  6. Amnistía fiscal en caso de desahucio: el no pagar los impuestos correspondientes a la vivienda.
  7. La moratoria: se aplicará a las familias con ingresos inferiores a 19.200 euros anuales.
  8. Que se paralicen los desahucios cuando se trata de la vivienda habitual
  9. Que se reconozca el alquiler social (no superior al 30% de los ingresos)
  10. Que Comunidades y Ayuntamientos cedan terrenos para que las promotoras construyan casas para alquiler asequibles a las familias más necesitadas y con opción de compra (Alfonso Guerra, ex-vicepresidente del Gobierno socialista).

Últimas noticias
Los desahucios se redujeron un 1,8% en 2018 según el Consejo General del Poder judicial. Los desahucios practicados fueron 59.671 y ello se debe al retroceso del 15,2% en los desahucios consecuencia de ejecuciones en embargos, en tanto que los desahucios por impago de alquiler subieron un 4,5%.

Como dije anteriormente el Gobierno acaba de aprobar una nueva ley hipotecaria:
  1. Nuevo reparto de los gastos de hipoteca
  2. Mayor protección al consumidor
  3. La amortización anticipada más barata
  4. Incentivos para pasarse al tipo fijo
  5. Mínimo de 12 pagos para que se embargue la casa
  6. Límites a los productos vinculados
  7. Suelo del 0% por defecto
Esta nueva ley va dirigida a reforzar la protección del consumidor ante los préstamos hipotecarios.

El Gobierno ha tomado medidas en cuanto al alquiler:
  • Aumenta los plazos del contrato de alquiler a 5 años
  • Limita a 2 mensualidades de fianza
  • El arrendador se hará cargo de los gastos de gestión inmobiliaria
  • Facilita la adopción de acuerdos entre el propietario y el inquilino para la renovación del contrato.
  • El contrato de alquiler no puede subir más que el IPC
  • Los alquileres turísticos:
    Se permite a las comunidades de vecinos vetar este tipo de arrendamientos
  • Se paralizan los desahucios a las familias vulnerables hasta que se encuentre una alternativa
Podemos ver como es un tema de actualidad preocupante:





Este último vídeo es la experiencia de una familia de Sevilla, quienes cuentan como ha sido el proceso de desahucio para ello y cómo lo han vivido.

Se está mandando a la calle a familias enteras cuando hay una cantidad enorme de pisos vacíos en todo el país.
Los desahucios han llevado a una generación de personas a varias situaciones traumáticas, llegando algunos al suicidio, a quedarse sin vivienda endeudados toda la vida, y excluidos de los circuitos económicos, personas a las que su vida ha cambiado muy bruscamente que pasan por cuadros de depresión, ansiedad y cuya autoestima está muy deteriorada y además tienen muy arraigado el sentimiento de culpabilidad.
Todos tenemos derecho a una segunda oportunidad. Tener un lugar digno donde vivir está recogido en la constitución (artículo 47). Es una cuestión que afecta a la dignidad de las personas y a su desarrollo social, personal y familiar.

Es de esperar que las nuevas medidas adoptadas en los últimos días por el Gobierno ayuden a paliar y, sobre todo, a solucionar el problema de los desahucios.

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